Las lesiones retiran a Mattias Asper a los 41 años

Mattias Asper tuvo que poner fin a su extensa carrera debido a las lesiones. Una triste y no deseada forma de finalizar una trayectoria que le llevó a ser internacional con Suecia y jugar, además de su país, en España, Turquía y Noruega. La decisión la tomó hace dos meses cuando su equipo de toda la vida, el Mjällby, descendió a la Tercera División sueca. En declaraciones al portal Aftonbladet Asper reconocía lo duro que se le ha hecho el último año: "He tenido muchos problemas físicos durante los últimos meses. El tiempo pasa factura y siento que ya no puedo seguir al mismo nivel". Aunque Asper no quería retirarse, su cuerpo dijo basta.

El ex guardameta de la Real Sociedad debutó como profesional en 1993 con el Mjällby. Tras unas buenas temporadas en Segunda División dio el salto a la máxima categoría del fútbol sueco en 1997 con su fichaje por el AIK Solna. Jugó la Champions y fue convocado por Suecia para la Eurocopa 2000. Con Javier Clemente en el banquillo y dada su predilección por los porteros altos y físicos, Mattias Asper cerró su fichaje por la Real durante la disputa de aquella Eurocopa.

Sin embargo, su etapa realista duró poco y tan solo llegó a participar en 10 partidos, debutando el 9 de septiembre en Anoeta ante el Racing de Santander. Tras encajar una estrepitosa goleada en Vallecas en la jornada 6 en la que Asper no estuvo muy acertado, su principal valedor, Javier Clemente, fue cesado. La llegada primero de Periko Alonso y más tarde de Toshack cambió el panorama para Asper, que dejó de contar para ambos. Únicamente llegó a disputar 4 partidos más con el galés en el banquillo, hasta la jornada 23 en la que Toshack confió definitivamente en Alberto. Su último partido con la Real fue el 10 de febrero de 2001 en Riazor, con derrota por 4-1 ante el Deportivo.